CHIHUAHUA, CHIH.- Se han construido 7 mil aulas nuevas. “Nunca se habían hecho tantas”, además, 15 universidades tecnológicas nuevas, y la Universidad en Línea para que los egresados del Cobach y de todos los bachilleratos puedan cursar una carrera profesional, expresó el gobernador César Duarte al poner en marcha el Ciclo Escolar 2016-2017 en el Plantel 17 del Colegio de Bachilleres de Ahumada.
“Esto lo que necesitan los jóvenes de hoy. Esto es lo que requieren una oportunidad de calidad. Ustedes recibirán nuestro apoyo hasta el último día de la administración para que sean el gran orgullo de Ahumada”, expresó el mandatario estatal.
Este plantel cuenta con 14 aulas, laboratorios de ciencias experimentales y de informática, sala audiovisual y oficinas administrativas. Además se imparte capacitación para el trabajo en áreas como empresarios emprendedores, prácticas contables, informática aplicada, así como ingles empresarial y turístico.
Señaló que una de las metas principales de su gobierno es llevar la educación de mejor calidad en el país que se imparte en el Cobach a los propios lugares donde habitan los jóvenes para que no se tengan que ir a otros lugares a estudiar, además de evitar que caigan en el espejismo de la delincuencia
Resaltó que a veces el proceso para abrir una escuela se desestima, pero requiere desde conseguir terreno, infraestructura, plazas de maestros que es lo más complicado, la confianza de los padres para que manden los niños, lo cual contribuye a un cambio trascendental para la sociedad de cada población.
Dijo que en el sexenio 2010-2016 se construyeron más de 250 escuelas de bachillerato en todo el estado, la matrícula de nivel profesional, tanto en las ciudades de Juárez y Chihuahua, se incrementó en 35 por ciento.
Sin embargo, el beneficio de la educación también se ha extendido a Camargo Jiménez, Madera, Cuauhtémoc, Guachochi, entre otros lugares, “porque lo fundamental es que las nuevas generaciones aprendan y sean alguien en la vida”, acotó.
Exhortó a los alumnos a esforzarse para obtener buenas calificaciones y así premiar el esfuerzo de sus padres por darles una buena educación, sin olvidar las inclinaciones sanas propias de la adolescencia y la juventud.
