CHIHUAHUA, CHIH.- La Diputada Imelda Irene Beltrán Amaya, emitió un posicionamiento mediante el cual, recordó a los más de 250 mil niños en el mundo que reciben un diagnóstico de cáncer y de manera lamentable, fallecen 90 mil.
El 15 de febrero se conmemora el Día Internacional del Cáncer Infantil, para recordar y reconocer la fuerza, coraje y resistencia los niños y sus familiares.
“Todo niño con cáncer merece la mejor atención médica y psicológica, independientemente de su origen, raza, estatus económico o clase social” dijo la legisladora.
Kale Beltrán expuso que las cifras son alarmantes, ya que el 70 por ciento de los casos de cáncer infantil tienen cura, sin embargo, el desarrollo de la farmacoterapia en el cáncer infantil ha disminuido y muchos niños son tratados con tratamientos farmacológicos descubiertos hace ya más de treinta años, no así en el caso de pacientes adultos con cáncer.
En el estado, Ciudad Juárez, Chihuahua y Parral son los municipios con mayor incidencia de casos, según informes de la Secretaría de Salud Estatal.
“Es un imperativo que los sistemas sanitarios hagan frente a estos retos llevando a cabo las reformas necesarias en su infraestructura sanitaria, reformas como incluir servicios satelitales en otras zonas, pudiendo así́ ofrecer una supervisión y tratamiento a pacientes más cerca de sus propias casas” explicó
Durante la sesión, la Diputada del Distrito 22, colocó a los legisladores un lazo dorado, para comparar la fortaleza y resistencia de los niños con cáncer con el oro.
Organizaciones del todo mundo, así como instituciones públicas y privadas, grupos de la sociedad civil y el mundo académico, han empleado el símbolo del lazo dorado para expresar su apoyo y solidaridad a la lucha contra el cáncer infantil.
“Luchadores incansables, guerreros que con su ejemplo nos enseñan a perseverar, y que no importa las circunstancias siempre encuentran un motivo para seguir caminando” mencionó.
Así pues, Beltrán Amaya hizo un llamado a la sociedad chihuahuense, instituciones de salud y a los legisladores, para tomar conciencia sobre la importancia de los desafíos a los que se enfrentan los niños y adolescentes con cáncer y sus familias.
Concluyó haciendo énfasis en que es imperante que los niños en cualquier lugar del estado tengan acceso a un diagnóstico y tratamiento precisos, para garantizarles el derecho a la salud así como un tratamiento acorde a sus necesidades.
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